domingo, 6 de noviembre de 2011

COSAS IMPORTANTES

Un profesor, delante de sus alumnos de la clase de filosofía,
sin mediar palabra, cogió un bote grande de vidrio y
procedió a llenarlo con pelotas de golf.
Después preguntó a los estudiantes si el bote estaba lleno.
Los estudiantes estuvieron de acuerdo en decir sí.

El profesor cogió una caja llena de perdigones y los vació dentro del bote.
Estos llenaron los espacios vacíos que quedaban entre las pelotas de golf.
El profesor volvió a preguntar de nuevo a los estudiantes si el bote estaba lleno,
y ellos volvieron a contestar que sí.

jueves, 26 de mayo de 2011

Caer está permitido, levantarse es una obligación.


El que se levanta es un ser distinto de aquel que sufrió la caída. El dolor amplió su visión. La pérdida lo vació de apegos y el proceso expandió su consciencia. A veces, el que cae es un ilusionista que, más tarde, se levanta ya como Mago. El ilusionista todavía maneja ilusiones y manipuladoras burbujas de plata. Sin duda, materiales tan efímeros que se diluyen ante cualquier brisa que las roza. Por el contrario, el mago renacido trabaja con elementos más sobrios y profundos. Acomete proyectos conociendo sus propias debilidades y mirando de frente a las sombras. Un ser más ecuánime y desprendido que domesticó su ego y barrió su arrogancia.

Párrafo extraido del libro "Inteligencia del alma". De José María Doria